Por múltiples razones, lo más importante en osteopatía es realizar un buen DIAGNÓSTICO OSTEOPÁTICO y para eso, en una primera visita se realiza un interrogatorio o entrevista exhaustiva, un análisis completo de la postura, palpación de los diferentes tejidos, test de movilización, test ortopédicos y neurológicos, análisis de exámenes radiológicos y posibles pruebas de laboratorio que pueda aportar el/la paciente.

El examen osteopático pretende descubrir todas las alteraciones mecánicas y funcionales del aparato locomotor, del sistema craneal, visceral y nervioso (tanto autónomo como central), así como de la postura y sus diferentes componentes, para dar explicación a los síntomas del paciente. De esta forma se establece un diagnóstico fiable sobre el origen y la causa específica de su dolencia, que en muchas ocasiones se encuentra a distancia de la zona donde el paciente presenta los síntomas. Es por tanto un abordaje holístico y global del individuo, que, junto al conocimiento profundo de la anatomía, fisiología y neurofisiología del cuerpo humano, dotan al osteópata de un potente y fiable razonamiento clínico.

Podríamos concluir que una sesión de osteopatía está compuesta de:

  • Entrevista o anamnesis: conocimiento de los antecedentes personales, familiares, quirúrgicos y traumáticos del paciente

  • Exploración física: análisis detallado de la postura, asimetrías, movimientos y expresión del sistema nervioso.

  • Valoración de pruebas complementarias: proporcionan información importante sobre posibles indicaciones y/o contraindicaciones al tratamiento, permitiendo personalizar la atención de forma precisa.

  • Tratamiento manual

Osteopatía ¿Tiene efectos secundarios?

La aplicación de movilizaciones, presiones y manipulaciones en los tejidos afectados implica cambios en el organismo que, si bien habitualmente no son perceptibles por el paciente, en situaciones excepcionales pueden cursar con leves molestias o variaciones. Es algo normal, forma parte del proceso de corrección y, en caso de ocurrir, desaparece en 24-48 horas. Es una terapia 100% segura.

Campos de actuación de la osteopatía

Osteopatía pediátrica

 

La Osteopatía pediátrica aborda las patologías más comunes que afectan al recién nacido, y que pueden estar relacionadas con el desarrollo de la vida intrauterina y la posición del feto en la pelvis materna durante el embarazo, con el proceso del parto, su duración, tipo y posible uso de instrumentos cómo fórceps o ventosas, así como con las primeras semanas de vida y la adaptación al nuevo entorno.

Cólicos del lactante, plagiocefalia, bronquiolitis, tortícolis, la otitis media, trastornos del sueño, irritabilidad, pie zambo, escoliosis o luxación congénita de cadera son algunas de las principales patologías que abordamos diariamente.

El diagnóstico en el recién nacido está basado en una exhaustiva entrevista a las familias, con la intención de conocer los pormenores de la fecundación, gestación, alumbramiento y entorno que pueden condicionar las alteraciones que presenta el/la bebé.

El tratamiento se realiza exclusivamente mediante suaves contactos y presiones, que ayudan a la normalización de la función y favorecen un mejor estado de salud y resolución de los signos y síntomas. La Osteopatía pediátrica es una disciplina segura, eficaz, resolutiva y sin ningún tipo de riesgo que se complementa de manera excepciona con los cuidados pediátricos habituales, obteniendo resultados excepcionales.

Contamos con el aval de nuestra amplia experiencia, y de la total confianza de las familias que acuden a nuestro centro.

Osteopatía en patologías respiratorias

 

Las patologías respiratorias han crecido de manera exponencial en las últimas décadas, afectando no solo a los mayores sino también a nuestros pequeños. El principal problema que encontramos en las afecciones respiratorias más frecuentes como el EPOC, el asma o la bronquiolitis es la dificultad para conseguir un buen control de la enfermedad, una menor necesidad de uso de fármacos y un menor número de exacerbaciones que mejoren la calidad de vida y el estado de salud del paciente.

La Osteopatía muestra grandes resultados en combinación con el tratamiento médico habitual para el control de estas enfermedades, sin riesgos ni efectos adversos ya que el tratamiento es eminentemente manual.

Pero no solo podemos encontrar beneficio de la osteopatía durante los procesos activos de estas patologías, sino que supone una eficaz herramienta para minimizar las secuelas derivadas de cada una de ellas, evitar la aparición de episodios repetitivos y normalizar las restricciones de estas que arrastran al aparato locomotor y que pueden predisponer y facilitar la aparición de dolencias a distancia.

Igualmente, el tratamiento osteopático supone una mejoría en la calidad de vida del paciente en todos sus ámbitos, restaurando una mayor funcionalidad y un mejor estado de salud.

En Clínica M4 contamos con algunos de los mejores expertos en osteopatía respiratoria, con varias investigaciones y publicaciones a sus espaldas.

Osteopatía en ginecología

 

La osteopatía ginecológica aborda problemas funcionales de la región uroginecológica: cicatrices por cesáreas o episotomías, dispareunia (dolor en las relaciones sexuales), dismenorrea (dolor asociado a la menstruación), amenorrea (ausencia de menstruación), problemas de infertilidad funcional relacionados con malposiciones uterinas, tensiones ligamentarias, endometriosis, dolores en suelo pélvico entre otros, así como la preparación al parto y la recuperación de este.

El objetivo principal es encontrar la causa del problema y mediante técnicas sutiles devolver la funcionalidad de los tejidos implicados. El tratamiento pasa por la exploración de la pelvis, columna lumbar y dorsal baja, por su importante relación con los nervios que van a controlar la sensibilidad y musculatura de la zona, la vascularización de la misma y los ligamentos que se relacionan con el sistema visceral.

El cráneo, ya que la hipófisis es la responsable de la secreción de hormonas destinadas a la maduración de los folículos del ovario y alteraciones sobre esta región pueden repercutir sobre su vascularización y funcionalidad. El diafragma por su trabajo sinérgico con el suelo pélvico, la importancia de una buena respiración y la ayuda en la descongestión venosa del abdomen y la pelvis. El sistema visceral ya que cualquier adherencia en el sistema digestivo y ginecológico provocada por infecciones, traumatismos, cicatrices…, pueden alterar la movilidad de la región y provocar cambios en el tejido. En algunas ocasiones es necesario el trabajo interno de los órganos ginecológicos para el tratamiento de cicatrices, puntos gatillo o malposiciones uterinas.

Osteopatía en el deporte

El papel de la Osteopatía en el deporte es cada vez más conocido gracias a la mayoría de deportistas, tanto profesionales como amateur, que cuentan con la figura del Osteópata como un miembro más de sus equipos médicos tanto para el tratamiento y prevención de lesiones deportivas, como para mejorar su estado de salud.

La elevada exigencia física y mental del deporte puede favorecer la aparición de lesiones, así como la recidiva de las mismas, disminuyendo el rendimiento deportivo y la capacidad de competir.

Igualmente se pueden producir alteraciones biomecánicas y desequilibrios que dificulten el gesto deportivo, minimizando el rendimiento físico y siendo fuente de posibles patologías musculares o articulares como tendinitis, esguinces, pubalgias, roturas fibrilares, fascítis plantar…

Los objetivos de la osteopatía en el deporte son principalmente:

  • Prevenir y minimizar la aparición de lesiones.

  • Tratamiento de las lesiones

  • Mejorar el rendimiento, optimizando sus recursos.

  • Minimizar el tiempo de recuperación.

En Clínica M4 nos preocupamos por tu salud, y por tu rendimiento.

Osteopatía en dolor crónico

El dolor crónico se define como aquel que perdura más allá de los 3 meses, aunque las diferencias con respecto al dolor agudo son mucho más numerosas y notables.

En la mayoría de ocasiones, el dolor crónico se muestra como una entidad que esconde tras de sí alteraciones de otras esferas más allá de la sensación dolorosa, y que suelen formar parte del entorno bio-psico-social del paciente: alteración de los patrones de sueño y descanso, modificación de la conducta, del estado anímico y las emociones, falta de ejercicio físico, exceso de estrés, actividad y/o cargas, hábitos alimentarios inadecuados, cansancio y/o fatiga crónica, migraña, depresión… Es lo que se conoce en ciencia actualmente como fenómeno de sensibilización central, ya que implica no solo al aparato musculoesquelético, sino al sistema nervioso en todo su conjunto, especialmente al cerebro.

Hablamos por tanto de un problema complejo, multifactorial y global, que requiere la intervención e implicación tanto de un profesional alta y específicamente cualificado, como del paciente para poder conseguir la normalización y equilibrio de los aspectos citados anteriormente, dando como resultado el control y desaparición del dolor.

La Osteopatía es una herramienta clave para la gestión de este tipo de dolencias, independientemente de su localización y duración, donde el profesional es capaz de reconocer las características clínicas de esta entidad mediante un excelente y pormenorizado examen clínico que nos lleve a identificarlo y abordarlo adecuadamente.

Es necesario por tanto no solo un amplio conocimiento al respecto del funcionamiento del sistema nervioso, sino una continua y actualizada formación e información respecto a las últimas evidencias científicas y al manejo clínico del dolor para poder afrontar este proceso con seguridad y éxito.

En clínica M4 somos expertos en dolor crónico.

Osteopatía en patologías digestivas

La alteración del funcionamiento de las diferentes porciones del tubo digestivo es algo mucho más frecuente de lo que podemos imaginar y puede facilitarnos la aparición de multitud de síntomas que, si bien tendemos a normalizarnos en nuestro día a día, son una muestra de que existe alguna alteración en la función óptima del mismo.

Algunos de los principales motivos que acuden a nuestra consulta son molestias intestinales, gastritis, estreñimiento, diarrea, reflujo gastroesofágico, hinchazón abdominal, hernia de hiato, exceso de gases, colon irritable, sensibilidad al gluten y/o celiaquía, incontinencia fecal…

La presencia de estos síntomas puede afectar de manera directa la calidad de vida del paciente, su entorno profesional, familiar y personal, algo que impacta directamente sobre su estado de salud de manera global.

Pero también pueden participar en la aparición de dolores percibidos en el sistema musculo-esquelético tales como lumbalgias, cervicalgias, cefaleas, migrañas, tendinopatías o sinusitis, que tienen su origen en la alteración de la función de alguno de los elementos del sistema digestivo y la sensibilización de las estructuras musculares y articulares vecinas, a través de reflejos víscerosomáticos. Es lo que se conoce en medicina como dolor referido.

Es la Osteopatía la disciplina que ofrece una solución eficaz a la mayoría de estos problemas mediante un análisis personalizado del funcionamiento de todos los sistemas del organismo, incluido el sistema digestivo, para lograr identificar el origen de la sintomatología del paciente, dando por tanto el primer paso para su resolución mediante la aplicación de un tratamiento manual basado es movilizaciones y presiones que tiene como objetivo restaurar el funcionamiento normal de los diferentes elementos del sistema, recuperando así la salud y el equilibrio del medio interno.

Osteopatía en patologías cráneo-mandibulares

Gracias a la Osteopatía craneal podemos abordar muchas patologías de diversa causa como cefaleas, migrañas, bruxismo, trastornos de la articulación temporomandibular, (ATM), acufenos, vértigos, sinusitis y/o rinitis, problemas oculares, mareo…

Asociado al tratamiento odontológico y de ortodoncia, la osteopatía es una herramienta eficaz en el tratamiento de los trastornos de la ATM, trastornos oclusales y trastornos de la postura, donde nuevamente encontramos resultados excelentes en sinergia con los mejores especialistas.

Es la esfera cráneo-mandibular un ámbito de amplísima actuación para el osteópata-fisioterapeuta, ya que su gran conocimiento y extensa formación hacen de este profesional un especialista de altísimo nivel para el manejo y tratamiento de estas dolencias. Además, la osteopatía nos permite la capacidad de integrar el sistema cráneo-mandibular como un elemento clave en el organismo capaz en muchas ocasiones de ser causa de diferentes dolencias a distancia como lumbalgias, cervicalgias, dolor en miembros superiores, alteración de la postura u hormigueos.

En nuestro centro abordamos de forma integral y holística al paciente, apoyándonos en los mejores profesionales.

Osteopatía en patologías musculo-esqueléticas

El dolor en el aparato musculo-esquelético, si bien es muy frecuente, requiere de un abordaje integral y holístico donde se investiguen las posibles causas que han llevado a desencadenar dolor en un lugar determinado, y cual o cuales son los tejidos responsables de tu dolencia.

No siempre existe una relación directa entre la zona que presenta el dolor, y el origen del problema.

Las algias vertebrales como la lumbalgia, cervicalgia, dorsalgia, tortícolis o neuralgias cervicobraquiales son algunos de los principales motivos de consulta donde la osteopatía muestra resultados muy eficaces. De manera especial, la Osteopatía ha tenido tradicionalmente unos resultados excelentes en el tratamiento conservador de la hernias discales y protrusiones lumbares consiguiendo una gran mejoría del dolor y los síntomas asociados, evitando en muchos casos la cirugía.

La afectación de los miembros con patologías como esguinces, peri-artritis escapulohumeral, ciáticas, dolores musculares, fracturas, tendinopatías, fascitis plantar, procesos degenerativos o artrósicos son también indicaciones donde la osteopatía muestra grandes resultados.

Es igualmente importante el papel de la Osteopatía en la prevención de estas patologías, así como en evitar la recidiva de las mismas.

En Clínica M4 hacemos un análisis y diagnóstico global, y un tratamiento específico para cada patología, cada persona, cada situación.

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